ISTO NÃO É ITAPOÃ..
SOLO ES LA HISTORIA DE UNA TARDE

É bom passar uma tarde em Itapoã
Ao sol que arde em Itapoã
Ouvindo o mar de Itapoã
Falar de amor em em Itapoã

Es uno de mayo , mañana fiesta en Madrid y luego fin de semana, esta lleno de nuevo personal en mi barrio. Es curioso andar hacia ninguna parte detrás de la gente y escuchar sin querer, o queriendo, parte de sus conversaciones.

Ya se que puede parecer poco discreto, pero yo no hago mal uso de la información que obtengo.

Todos están de vacaciones, un paréntesis en su vivir diario que los lleva de manera engañosa a creer que la felicidad está escondida en sus apartamentos abandonados desde Semana Santa.

Mayormente las victimas de mi seguimiento de hace un rato , han llegado del norte y centro de la península, buscando el sol del mediterráneo .

Un anticipo del verano que les brindará la oportunidad de ser felices por mucho mas tiempo ,15 días o con suerte 21.

Van vestidos con ropa demasiado liviana para la temperatura que tenemos..

Y todos los que andaban con shorts, sandalias y camisetas de manga corta estaban helándose a las seis de la tarde por la brisa del mar. Y renegando del viento frío, claro ! que clima tan desagradable el de este pueblo.

Ya pensaste en comprar un piso en Tombuctú?

Hordas de inconscientes que el lunes estarán con fiebre y tos, pero con un color saludable porque el sol, ese si , no tiene piedad ninguna y quema las pieles tiernas y descoloridas por la hibernación.

Yo no he visto a ninguno extremadamente feliz. Quiero decir algo digno de llamar la atención como yo suelo estar algunas veces.

Delante de mi , en la cola de la heladería una rubia falsa de piel morena, con la popa mas grande que la del Titanic, ha comprado un fantástico helado de 5,5 euros y 4 sabores. Le he ido al rebufo unos momentos y se lo estaba comiendo por la calle con verdadero desespero como si mañana mismo el tiramisu , chocolate sin azúcar, vainilla y pistacho fuesen a extinguirse para siempre cual dinosaurios. Pienso que posiblemete los culos humanos tengan un limite de crecimiento.

Dos parejas de cerca de 60 años despotricaban por la subida de las hipotecas. Conversación aburrida y con interés meramente anecdótico o estadístico. Para quien no lo sepa, aquí se ha estado los últimos años construyendo y vendiendo muy caros habitáculos ridículos de 60 m2 (yo vivo dentro de uno de ellos) .Inflando grandes pompas de jabón , como las que se hacían con el mistol clásico, que son las mas gordas.Muchos de estos subproductos los han estado consumiendo una cierta clase de gente para invertir , revenderlos o alquilarlos a precios de poca vergüenza y ahora llegó a la menopausia la gallina de los huevos de oro, reventó la burbuja y el jabón pica en los ojos.

Apenas en Agosto pasado, el tema habitual a voz en grito de los incautos a los que seguía era : yo he comprado dos yo voy a comprar otro, aquí los tienes por 180 , apretalo que te lo da por menos.... asuntos de doscientos miles de euros que yo de manera automática convierto en pesetas porque aun me cuesta saber que valor tiene el dinero. Creo que nunca voy a saberlo.

Ahora ya no hablan de comprar nada, hablan de inquilinos que desaparecen dejando impagados dos meses, además del agua y luz; de que quedaron los pisos vacíos ; de las 4 inmobiliarias que han cerrado en esta calle y de verdad he tenido que acercarme un montón porque hablan como avergonzados o preocupados, no se bien, pero ya no gritan .

Un papá amonestaba de malas maneras a su pequeña porque no podía parar quieta , otro muy pijo ha tenido que recoger las cacas del perro ante mi acusadora mirada , apuesto a que si va solo deja el regalo ahí porque cada día estas calles son un campo de minas.

He comprobado varios ejemplares de una variedad extraña de perrito, unos bulldogs enanos redondos con cara de cabrón que mas bien parecen el resultado de un experimento genético.

Y también me he dado cuenta de que nadie, ni los mayores, ni los jóvenes , ni los medianos, hombres ni mujeres, se estaba besando en la calle.

Solo alguna tímida mano cogida de otra y un perdido brazo apoyando el peso sobre un hombro para paliar el fresco de la tarde.La gente dá demasiadas cosas por sentadas y tiene la felicidad puesta a plazo fijo. Así no se gasta.

O quizás Dios da maíz al que no tiene gallinas...